En ciertos sectores, el número de productos manipulados, falsificados, robados o devueltos indebidamente aumentan año tras año, provocando numerosas pérdidas a los fabricantes y vendedores. Se hacen necesarios métodos de precintado que sean efectivos ante todos estos problemas, que pueden ser resueltos mediante el uso de etiquetas que mejoran la seguridad de los productos.
Hay negocios, como la electrónica de consumo y los productos de alta gama, donde son imprescindibles este tipo de etiquetas para evitar sustracciones, manipulaciones de los productos o devoluciones de productos que ya han sido usados.
Existen dos tipos de etiquetas que han demostrado ser altamente efectivas contra este tipo de malos usos: las etiquetas VOID y las etiquetas ultradestructibles. Ambas son muy eficaces para el precintado, ya que, cuando se despegan, no pueden volver a colocarse en su posición original, por lo que la apertura del embalaje se hace evidente y es imposible simular que no ha sido abierto.
Veamos en qué consisten y cómo funcionan cada una de ellas.
Etiquetas VOID
Uno de los métodos para certificar que un producto está protegido y no ha sido manipulado es la utilización de las etiquetas VOID. Con ellas, sus clientes podrán estar seguros de que el embalaje no ha sido abierto con anterioridad y que el artículo o artículos que van a disfrutar cumplen con todas las garantías.
Las etiquetas VOID son unas pegatinas que no pueden ser despegadas sin dejar constancia de ello. Cuando una pegatina VOID se levanta, deja escrito un mensaje –normalmente la palabra “void”, de ahí su nombre– sobre el embalaje y no puede volver a ser pegada. De esta manera, siempre que un producto haya sido abierto, quedará constancia de ello y no podrá volver a cerrarse sin que sea evidente su manipulado.
Este sistema es ideal para productos tecnológicos, artículos de lujo, seguridad, logística y otros muchos sectores; de una manera muy sencilla podremos estar seguros de que durante todo el proceso, desde que la mercancía sale de la fábrica hasta que llega a las manos del cliente, no ha sido manipulado, con lo que los usuarios pueden contar con que reciben un producto en perfectas condiciones.
Así mismo, las etiquetas VOID son un elemento disuasorio para robos y manipulaciones que se puedan producir durante el transporte o envío, ya que dejará en evidencia cualquier intento de alterar el precinto.
Por otra parte, en artículos cuya devolución no se permita una vez que el embalaje haya sido abierto, la etiqueta VOID nos ofrecerá todas las garantías de que el producto no ha sido utilizado por el cliente y evitará la devolución de mercancía usada y manipulada por el cliente, y que nadie más va a querer adquirir, evitando numerosas pérdidas.
Etiquetas ultradestructibles
Las etiquetas ultradestructibles, por su parte, son también una buena manera de saber cuándo se ha roto un precinto. Estas etiquetas están fabricadas en un material que se destruye en trozos diminutos cuando intentamos despegarlas, por lo que es imposible volver a colocarlas en la forma y posición iniciales.
La utilización de etiquetas autodestructibles nos asegura, al igual que las etiquetas VOID, que el producto no ha sido manipulado o falsificado. Son ideales como etiquetas de licencias, sellos de garantía, advertencias de seguridad, paquetería, etc.
Además, al ser imprimibles, podemos aprovechar para añadir otros elementos de seguridad en ella, como números de serie o códigos de barra, pudiendo incluso mejorar la trazabilidad del producto.
Las etiquetas VOID y autodestructibles, por tanto, son elementos de seguridad imprescindibles en ciertos sectores, ya que certifican que los productos que llegan al cliente son originales y están en perfecto estado.
Pero podemos reforzar esta seguridad más todavía combinándolas con otras etiquetas. Por ejemplo, con las etiquetas EAS podemos evitar aún más sustracciones, ya que poseen sensores que hacen saltar las alarmas en los arcos antihurto de establecimientos comerciales, cuando no han sido desactivadas.
También son compatibles con etiquetas RFID, especialmente útiles para el control logístico. Las etiquetas RFID funcionan mediante radiofrecuencia, lo que hace posible que sean localizables en cualquier punto de la cadena de suministro, facilitando la trazabilidad del producto y la gestión del stock.
En Tea Adhesivos somos especialistas en etiquetado industrial, por lo que podemos asesorarle en la solución más adecuada para garantizar la seguridad de sus productos.