La pandemia nos ha hecho replantearnos todas nuestras conductas cotidianas que tienen que ver con el contacto físico. En esta nueva normalidad, el QR está viviendo un segundo auge ya que nos permite acceder a un montón de información sin tocar nada más que nuestro propio teléfono móvil.
QR en tiempos de Covid-19
Un QR es un código que sirve de nexo entre el mundo físico y el digital. Y es que cuando leemos un código QR mediante nuestro smartphone, nos conduce a una dirección web sin necesidad de teclear nada.
Estos códigos fueron pronto utilizados por China para minimizar la transmisión del Covid-19, llegando a usarse para rastrear los contagios entre la población. Al ser una tecnología barata y no requerir apenas infraestructura, es de fácil implantación. Por ello, rápidamente surgieron decenas de aplicaciones, que ahora llegan a Europa.
Códigos QR para hostelería y restauración
La hostelería se enfrenta al reto de minimizar la interacción física en los locales. Iniciativas como Código Carta permiten digitalizar las cartas de establecimientos de modo que se puedan sustituir los menús físicos por códigos QR en mesas o fachadas.
Por su parte, Glovo está usando el QR para permitir a los clientes pedir y recoger sus pedidos en los propios establecimientos.
Etiquetas QR para el turismo
El turismo es un sector muy afectado por el Covid-19 y minimizar los riesgos es también fundamental para mantener su actividad. Muchos alojamientos y oficinas de turismo como la de Totana, en Murcia ya han migrado los folletos sobre lugares que visitar o excursiones al formato digital sirviéndose de estos códigos.
Telefónica e iUrban por su parte, han desarrollado una aplicación que permite solicitar y hacer seguimiento de los servicios de restaurante y bar de los hoteles por medio de QR.
QR para manejar máquinas
Otro uso importante de los códigos QR es el que evita que toquemos botones de una máquina. Ya existen soluciones en este sentido para máquinas de vending, para controlar un ascensor e incluso para validar billetes de autobús mediante códigos QR.
Realidad aumentada, la hermana mayor del QR
La combinación del QR con la realidad aumentada en el packaging promete experiencias de usuario de mayor engagement. Resulta ideal para contar todo lo que queremos sobre un producto sin lastrar el envase, aportando al usuario contenido multimedia de todo tipo. Un ejemplo lo tenemos en la última campaña de Halloween de Amazon, que incorporó la realidad aumentada en sus cajas para permitir customizar una calabaza y llevarla a la vida en 3D.
La creatividad es el único límite de una tecnología que permite integrar promociones, gamificación y todo tipo de recursos que despiertan la curiosidad del usuario. Algo probado con éxito para targets infantiles o juveniles en campañas como la de los caramelos Pez asociando su marca con Angry Birds o Pringles, que incorporó minijuegos utilizando su propio envase como mando.
TEA Adhesivos integra códigos QR en sus etiquetas para mejorar la relación del usuario con el producto, atraer su atención y fidelizarlo. Es una solución económica y personalizable que abre un sinfín de posibilidades para las etiquetas y envases de tus productos.